14 de Abril de 2007...algún bosque de Picos de Europa (León)
Ya estaba de vuelta para mi casa después de un día de relax paseando por las montañas de León y la niebla comenzó a bajar.Mientras conducía, iba viendo a mi derecha un bosque de robles que desprendía una magia especial.Tenía la sensación de que algo me decía que parase el coche y me adentrase en aquel lugar.No dudé un minuto.Mi estancia en el bosque no fue muy extensa,pero la justa para apreciar la magia y la nostalgia que impregnaban aquel lugar. Era como si un canto dulce, pero a la vez empapado de amargura, inundara el ambiente y fuera capaz de cautivar el corazón de todo ser vivo que paseara por sus sendas. Sólo, desnudo de todo pensamiento y respirando hondo dejándome embaucar por aquel aroma a tormentosa humedad.
Ocho disparos fueron los que salieron de mi cámara.Ocho aromas a deseo, soledad, frío...Una fusión entre el ser humano y la naturaleza.
Hay veces que los árboles no dejan ver el bosque, pero una vez encontrado, solo tienes que elegir que camino escoger, ¿la verdad? , ¿la mentira?, ¿el bien? ¿el mal?, todo esta tan cerca y tan distante a la vez...
Ocho disparos fueron los que salieron de mi cámara.Ocho aromas a deseo, soledad, frío...Una fusión entre el ser humano y la naturaleza.
Hay veces que los árboles no dejan ver el bosque, pero una vez encontrado, solo tienes que elegir que camino escoger, ¿la verdad? , ¿la mentira?, ¿el bien? ¿el mal?, todo esta tan cerca y tan distante a la vez...
2 comentarios:
Una foto estudenda, que unida al texto,nos crea conciencia para poner freno al cambio climático.
Saludos.
Pues sí, cada vez que la veo me gusta más.
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